El Hospital de Apoyo de Yungay en Áncash fue inaugurado en una ceremonia que contó con la participación del presidente del Consejo de Ministros, Gustavo Adrianzén, presidente del Gobierno Regional de Áncash, Koki Noriega y otras autoridades locales, pero notablemente sin la presencia de la presidenta Dina Boluarte. Esta moderna infraestructura sanitaria, cuya inversión supera los 351 millones de soles, beneficiará a más de 50 mil habitantes de la región, ofreciendo un acceso mejorado a servicios de salud.
El hospital, que fue entregado por la Autoridad Nacional de Infraestructura (ANIN) al Gobierno Regional de Áncash el 20 de diciembre, ha iniciado sus operaciones con éxito. Desde su apertura, se han realizado 16 cirugías y se han atendido a más de 2,300 pacientes en consultorios externos, 57 en hospitalización y 565 en emergencias. Este establecimiento se posiciona como uno de los más grandes y modernos de la región, dotado de 3 ambulancias, 33 camas hospitalarias y 4,197 equipos biomédicos de última generación.
Durante la inauguración, el jefe de la ANIN, Hernán Yaipén, destacó la importancia del trabajo en equipo entre el Poder Legislativo, el gobierno regional y el Poder Ejecutivo para la ejecución del proyecto. Además, se firmó un convenio de cooperación interinstitucional entre la ANIN y el Gobierno Regional de Áncash, asegurando el mantenimiento de la infraestructura y el equipamiento del hospital.
El nuevo hospital no solo se enfoca en la atención médica, sino que también incorpora elementos de ecoeficiencia y sostenibilidad. Con un sistema antisísmico y drenaje pluvial, está preparado para enfrentar eventos climáticos extremos. Además, cuenta con tecnologías avanzadas, luminarias LED de bajo consumo y un sistema de gestión de residuos que asegura un manejo adecuado de los desechos peligrosos. La ANIN reafirma así su compromiso de transformar la vida de los peruanos a través de proyectos ejecutados con transparencia y eficiencia.
