Granizadas y lluvias intensas impactan cultivos y viviendas en las provincias de Antonio Raimondi y Pomabamba

Alrededor de las 16:00 horas del lunes 13 de enero, se registraron granizadas seguidas de lluvias intensas en el centro poblado y distrito de Chaccho, en la provincia de Antonio Raimondi. Este fenómeno climático dejó un saldo de cuatro viviendas afectadas y una hectárea de cultivos de maíz y papa dañados. Ante esta situación, el gobierno local ha anunciado que continuará evaluando los daños y coordinará la entrega de bienes de ayuda humanitaria a los afectados.
Simultáneamente, en la localidad de Huanchacbamba, ubicada en el distrito de Huayllan en la provincia de Pomabamba, también se reportaron lluvias intensas acompañadas de granizadas. Este evento meteorológico impactó una hectárea de cultivos de maíz, papa, chocho y trigo que pertenecen a 15 familias de la zona. Además, se produjeron derrumbes a lo largo de 15 metros de la vía vecinal que conecta Huanchacbamba con Ingenio, en el sector Ashuaj, complicando aún más la situación para los pobladores.
Asimismo, las granizadas en los sectores de Ranquis y Tayapucro, dentro del distrito y provincia de Pomabamba, también causaron daños significativos. Se estima que alrededor de ocho hectáreas de cultivos de papa, maíz, habas y trigo resultaron afectados, junto con la vía vecinal en el tramo Ranquis – Angashcancha. Estos daños agravan la situación de las familias dependientes de la agricultura en estas áreas.
El Centro de Operaciones de Emergencia Regional (COER) Áncash ha informado que el personal de los municipios se trasladará a las zonas afectadas para continuar con la evaluación de daños. Este esfuerzo es crucial para determinar las necesidades de las comunidades afectadas y planificar las acciones de respuesta adecuadas para mitigar el impacto de este desastre natural.
Las autoridades locales han hecho un llamado a la población para mantenerse alerta ante posibles nuevos eventos climáticos y a reportar cualquier incidente que pueda causar daños adicionales. La situación actual pone de manifiesto la vulnerabilidad de las comunidades rurales ante fenómenos meteorológicos extremos y la necesidad de implementar medidas de prevención y respuesta efectivas.